top of page

Típico que... Traumada del futuro


El futuro es algo que siempre nos causa angustia porque no sabemos bien qué va a pasar. Pero con todo lo que ha pasado últimamente (en especial en el 2016), con todos los avances científicos y tecnológicos y con series como Black Mirror (MEGA RECOMENDACIÓN) la angustia y el trauma va en aumento, al menos para mí.




Si no han visto o al menos oído de Black Mirror, les cuento; es una serie original de Netflix, con 3 temporadas, de pocos capítulos cada una. Ningún capitulo está realmente relacionado, pues en cada uno manejan una situación diferente con personajes diferentes. La temática central gira en torno a la tecnología y al futuro, y lo que todos estos avances podrían traer como consecuencia para el ser humano y el mundo. Es una serie muy fuerte pero que todos deberíamos de ver, pues no es más que nuestra realidad, solo que un tanto exagerada; pero no está nada lejano a lo que vivimos todos los días. De ahí el trauma y la preocupación. De verdad lloré en varios capítulos (soy bien chillona, pero es que sí me impactó), y de plano he tratado de alejarme lo más posible de mi celular (del cual soy bastante adicta).




No les voy a empezar a decir que la tecnología es mala ni mucho menos, pues al contrario nos ayuda y mucho; gracias a ella podemos entre muchas cosas aprender, conocer, salvar y comunicarnos. Y además yo soy bastante adicta a cosas tecnológicas como mi iPhone (con todas las redes sociales), mi Spotify y mi Netflix. El problema es cuando nos volvemos totalmente dependientes de ella, cuando dejamos que nos maneje y cuando nos vamos deshumanizando a través de su uso.




Debe de ser para acerarnos a los demás no para crear barreras enormes entre nosotros. Pareciera muchas veces que ya se nos olvidó cómo comunicarnos, como hablar con alguien frente a frente viéndolo a los ojos; ya nada más sabemos comunicarnos a través de whastapp, de tweets, de emojis. Estamos todo el día pegados a un aparatito (que además sabe TODO de nosotros), ya sea oyendo nuestra playlist en Spotify, checando nuestra validez y la de los demás a través de likes en Facebook y en Instagram, documentando nuestro día en Snapchat, o buscando una aventura o al amor de nuestra vida en Tinder. Se nos ha olvidado cómo disfrutar la vida sin tener que estar tomando foto o video de lo que vemos y de lo que pasa. Enloquecemos cuando no hay señal o cuando no podemos conectarnos a wi-fi.




La vida se nos está yendo en estos aparatitos, en estas tecnologías, en estas frivolidades. Y es fuerte, porque todos en poca o en gran medida nos hemos vuelto esclavos de estos avances que han ido surgiendo desde que llegó Internet. Y eso que la esclavitud se supone que ya se abolió hace algún tiempo. Yo sí lo aceptó, me empieza a dar ansiedad cuando no he checado mi Instagram o mi Facebook en un rato… y qué horror. Porque además si viera cuánto tiempo pierdo checando las redes sociales, seguro es mucho, y es tiempo que podría estar empleando en cosas productivas.




En fin, el mensaje es, que la tecnología está, y que seguirá estando, avanzando y creciendo de forma impresionante. De nosotros depende no convertirnos en esclavos de ella, en no perdernos, en no deshumanizarnos; en aprovecharla y usarla pero sin dejar que nos maneje… la idea es que nosotros la manejemos a nuestro beneficio y al del mundo, no al revés.




No olviden ver Black Mirror, nada más para que vean cómo estamos viviendo.








Créditos de imágenes:

- marketingdirecto.com

-collider.com

-divinaescencia.blogspot.com

-wordpress.com

-lazonaceroxd.blogspot.com

-10razonesparaestaraqui.wordpress.com


Follow Us
  • Twitter Basic Black
  • Facebook Basic Black
Recent Posts

© 2015 Sunday Morning by Charlie created with Wix.com

bottom of page